domingo, 11 de diciembre de 2016

Variables y Continuidades en la Educación Secundaria de Neuquén

                                                                                                                                                                                                                                                                                              Daniel HERRERA*

¿Cómo pensar y repensar el quehacer educativo en la Provincia de Neuquén? ¿Cómo tomar decisiones efectivas para satisfacer las demandas y no inhibir el derecho social a la Educación? …
    En la Provincia de Neuquén hay una discusión sobre los principios y el valor social de la Educación en general, y en la Educación Secundaria en particular. Esta problemática se ha resuelto en otras jurisdicciones, pero en el marco de una discusión abierta en la Provincia, un análisis significativo de las políticas educativas debe abarcar no solo lo que se dice sino también los vacíos, los silencios y los aparentes olvidos.
   Para realizar un análisis cualitativo, más allá de las creencias e intereses personales o colectivos, vamos a basar este artículo en la información oficial suministrada por la DINIEE – Dirección  Provincial de Estadísticas y Evaluación – Consejo Provincial de Educación de Neuquén, donde se cuantifican las variables educativas en la Educación Secundaria en el período 1998 – 2015. Distintos sectores coinciden en que para la toma de decisiones son muy trascendentes las informaciones estadísticas, es a partir de la confrontación empírica y de las corrientes pedagógicas donde aparece el juego dialéctico para conformar el análisis crítico  y el pensar reflexivo.  Como sostiene Klimovsky… “no cabe duda de que en ciertas circunstancias la presencia de la cuantitatividad ofrece ventajas en cuanto al poder predictivo y explicativo de las teorías: contar con leyes cuantitativas es más fuerte y productivo que contar solamente con estructuras o correlaciones meramente comparativas (…) No cabe duda de que es ventajoso introducir elementos cuantitativos en ciencia, siempre que ello no se haga de una manera exagerada y sin necesidad”.
  Antes de abrumarnos con cifras estadísticas, creo necesario aclarar que es intención de este trabajo acercarnos al conocimiento y no sólo a la información. Abraham Moles hablaba de “cultura mosaico” para referirse a un modelo de sociedad donde se tiene mucha información – raudales de información en una sumatoria interminable, sin prioridad – pero se conoce poco.
   La Provincia de Neuquén, en el año 2015 tiene una matrícula en la Educación Secundaria muy importante en el sistema público y variable en el sector privado, en Bachilleres de 5 años de duración 33657 estudiantes, en Técnica de  6 años de duración 14222 estudiantes, sumado a los 14160 Jóvenes y Adultos que se encuentra completando su escolaridad obligatoria, tenemos un total 62039 estudiantes.


   Desde 1998 a 2015, la matrícula se incrementó en Bachilleres 23,55%, en Técnica 72,97% y en Jóvenes y Adultos 70,70%. En lo referido al sector de Jóvenes y Adultos el porcentaje desmedido se da en el sector privado, es decir, el 70,70% es el promedio del sector privado y el público, si desglosamos esto tenemos 51,39% de incremento de la matrícula en el público y un 5000% de aumento de matrícula en el sector privado. En términos absolutos podemos tomar mejor dimensión, la principalidad del Estado era el eje hasta los ´90, no existía propuesta privada, pero a partir del desarrollo de propuestas de terminalidad del secundario creció exponencialmente la opción “privada” y de los 1652 estudiantes que en el 2015 asisten a la propuesta privada, 1281 (77,54%) lo hacen en la “organización No graduada”, es decir, rinden asignaturas pendientes y se les otorga el certificado de “terminalidad del trayecto”. Es un serio problema el del desgranamiento, un poco se atendió con el Plan Fines y otro poco se resolvió en el “mercado educativo”. De todas maneras los 1652 estudiantes del sistema privado de Jóvenes y Adultos, sólo representan el 11,66% de los 14160 que intentan completar sus estudios secundarios en toda la Provincia.
  Si analizamos el crecimiento de la matrícula, en términos comparativos debemos analizar el crecimiento de las Instituciones Educativas, así, podemos observar en el ámbito estatal considerando todos los Distritos Educativos que las escuelas secundarias con Planes de 5 años crecieron un 23,72%, las Técnicas con Planes de 6 años un 50% y las de Jóvenes y Adultos un 90%, entre el año 1998 y 2015. Es posible inferir que una Escuela para Jóvenes y Adultos se crea a contraturno, en el Vespertino o en el nocturno, donde ya funciona una Escuela Secundaria con Plan de 5 años.
  La Provincia de Neuquén posee 198 Instituciones de Nivel Secundario, considerando el sector público y privado,  con Planes de 5 y 6 años, más las propuestas para Jóvenes y Adultos con Planes de 3 y 4 años. Hay 39 establecimientos privados, es decir, un 19,7% del total. La ubicación de las propuestas privadas no son simétricas, se ubican en los Distritos uno, cuatro, ocho, nueve y once, en términos geográficos, Neuquén Capital y las localidades del Sur, Villa La Angostura, San Martín, Junín de los Andes y Aluminé.
  En términos estadísticos hay 198 Instituciones Educativas, pero No 198 establecimientos o edificios. Esto es interesante aclararlo, ya que las Tasas de Escolarización de los Censos Nacionales del 2001 y del 2010, indicaban para jóvenes de 13 a 17 años un 78,45% y un 75,45%  respectivamente. Es decir, casi un 25% de jóvenes no asistían a un ciclo de escolarización obligatoria, lo que indicaba un problema grave a resolver, en principio de infraestructura y luego de contenido pedagógico.
   Si establecemos una correlación entre el crecimiento de la matrícula y el de Instituciones Educativas, observamos que en Bachilleres de Planes de 5 años la matrícula creció un 23,55% y las escuelas un 23,72%, en las Técnicas la matrícula creció un 72,97% y las escuelas un 50%, en las propuestas de Jóvenes y Adultos la matrícula creció un 70,70% y las Instituciones Educativas un 90%.
  Antes de intentar algunas conclusiones deberíamos recordar la diferenciación entre “demanda efectiva, demanda potencial y demanda social” que conceptualizó María Teresa Sirvent, la demanda efectiva, son  aquellas aspiraciones educativas que se traducen en forma concreta en el ámbito educativo en una sociedad en un momento determinado, mientras que, la demanda potencial se refiere a la población joven y adulta que debería demandar en relación con una necesidad educativa; y  la demanda social es la expresión organizada y colectiva de necesidades y reivindicaciones que los miembros de un grupo social buscan implementar a través de decisiones institucionales y/o públicas.
  Alerta… seis de cada diez jóvenes no termina el secundario en la Provincia de Neuquén (en el tiempo estimado)... Así titula un diario de alcance provincial. Efectivamente el desgranamiento, que estadísticamente resulta de sumar repeticiones y abandonos, en 2015 nos indica que en Modalidad común, carreras de 5años, es del 58,04%, mientras que en la Modalidad Técnica el desgranamiento es del 65,49%. Por oposición obtenemos la “retención” que describe el porcentaje de estudiantes que hace su carrera escolar según las normas vigentes, en consecuencia, la retención en Modalidad común es del 41,96% y en Técnica del 34,51%. Las repeticiones y abandonos son variables en distintos Distritos Educativos según contexto geográfico, económico y social, cuyo análisis excede los límites de este trabajo.  
  Ahora bien, estas cifras alarmantes se vienen sosteniendo por lo menos desde el 2003, más de ocho cohortes (períodos de cinco años) sin que desde el Ministerio o desde el Consejo Provincial de Educación se emprendiera una política educativa que empiece a establecer nuevos objetivos y que estos indicadores tiendan a mejorar.
   Algunas dimensiones de esta problemática las hemos ido trabajando, como lo son el sector de Jóvenes y Adultos, otras como la Formación Docente no han sido abordadas, aunque desde el artículo periodístico mencionado se hace uno de los ejes; aquí formulamos un interrogante ¿Cuál es la política de los Institutos de Formación Docente en Neuquén? Particularmente la de formar Profesoras y Profesores para los Niveles Inicial y Primario, sólo existen en el interior provincial algunos IFD con propuestas de formación para Profesoras y Profesores de Nivel Secundario en algunas áreas curriculares como Lengua y Literatura, Matemática, Física, Música, Biología y Educación Física. Tendríamos que contar con la formación del profesorado de la Universidad Nacional del Comahue y las experiencias a Ciclo cerrado del Instituto Nacional de Educación Tecnológica – INET – para docentes en ejercicio en las Escuelas Técnicas. En resumen, nada programado y sostenido como política de Formación del Profesorado en la Provincia que ya cuenta con casi 13000 docentes inscriptos en la Junta de Clasificación de Media y Técnica del CPE.
   Cuando nos detenemos a analizar la cantidad de Instituciones creadas observamos que la demanda efectiva se sostiene en la Modalidad común, aproximadamente  23,5% de aumento de matrícula y de escuelas… sobrepoblación en la Modalidad Técnica se construyeron 50% de escuelas y la matrícula creció un 70%, por eso el reclamo de las familias que se articulan en comunidades reclamando por un banco para sus hijos e hijas, la demanda social se plantea muchas veces desde los Consejos Escolares Distritales, Redes Intersectoriales, Vocalía por la Comunidad y el gremio aten… Hay otra continuidad, la falta de Planificación de nuevos edificios.
   Demanda potencial…  Alarma porque 6 de cada 10 estudiantes no termina el secundario… Deberíamos agregar otra “Alarma por las tasas de escolarización”, 25 de cada 100 jóvenes entre 13 y 17 ni asisten al secundario, hablamos de miles de estudiantes potenciales que ven vulnerado su Derecho a la Educación. En el año 2010, casi 6000 niñas y niños de 13 años no asistían al nivel secundario. La propuesta curricular y didáctica entra en disputa con los participantes del proceso educativo. Ahora bien, con los que no están en el Sistema Educativo no podemos trabajar para desarrollar sus operaciones del pensamiento, es decir, se necesita de políticas públicas que garanticen el acceso al derecho a aprender.
  Al no existir una política de planificación educativa, que considere las particularidades de las comunidades, las condiciones de vida y de acceso a la educación, todo queda en manos de las familias que puedan articular sus demandas. No se trata sólo de igualdad de oportunidades, sino también de posibilidades. Como sostiene Dubet… “el fracaso de la igualdad de oportunidades no se debe solamente a desigualdades sociales situadas río arriba de la escuela y a las desigualdades todavía persistentes de la oferta escolar (…) Todo el problema se debe a que la creencia en este modelo de justicia lleva a las familias a pensar que no hay otras oportunidades fuera de las que da una buena escuela. Esta convicción tiene como efecto acentuar la competencia escolar entre las familias a las que les interesa ahondar la brecha con el fin de asegurar las mejores oportunidades a sus hijos (…) Esta creencia tiene efectos bien reales: el peso y la influencia de las instituciones escolares acrecientan las ventajas financieras y sociales de los más diplomados, y cuanto más grandes son esas ventajas, más socialmente desiguales resultan”.   
  Otra de las preocupaciones del Ministerio de Educación de Neuquén es que… “los alumnos no están aprendiendo lo que les puede servir en la Universidad”,  parecen desconocer que se está realizando un debate a lo largo y ancho de la provincia donde, entre otros ejes, se discute sobre la “función social de la educación secundaria”. Se están planteando además de la función de formación para estudios superiores, la vinculada al trabajo y la formación para la ciudadanía. La Mesa Curricular Provincial está llevando adelante un proceso de construcción curricular participativa, cuyos resultados se verán en los próximos años.
   Hasta aquí hemos desarrollado un conjunto de variables y de continuidades en la población estudiantil, de los resultados en términos de promoción y egreso, del accionar de la organización sindical y de las vocalías del CPE, pero sobre todo un esquema de funcionamiento del gobierno Provincial que ha mantenido una política pública a lo largo de estos años sin atacar las causas profundas de estos “alertas”, de estos indicadores que deberían servir para pensar y repensar las políticas educativas. Si existiese voluntad de acercarnos a una sociedad más justa e igualitaria, deberían transformar principios en programas de acción que tiendan a eliminar las desigualdades sociales y a mejorar las posibilidades y oportunidades educativas.
Bibliografía:
-          Documentación de la Dirección Provincial de Estadística y Evaluación – Consejo Provincial de Educación Neuquén 1998 – 2015.
-          DUBET, Francois “Repensar la Justicia Social, contra el mito de la igualdad de oportunidades” Siglo XXI editores, Buenos Aires 2011.-
-          KLIMOVSKY, Gregorio  “Las desventuras del conocimiento científico” aZ editora – Buenos Aires, 2011.-
-          SIRVENT, María Teresa “Educación de Jóvenes y Adultos en un contexto de ajuste” Revista del IICE – UBA. Año V, N° 9 . 1996.
Neuquén, 27 de noviembre de 2016.
             
*Profesor y Licenciado en Ciencias de la Educación – FACE – Universidad Nacional del Comahue.- Director del CPEM N° 12 de la Ciudad de Neuquén

jueves, 13 de octubre de 2016

Evaluación Educativa, su dimensión política.                                                                     Acerca del Operativo Nacional de Evaluación “Aprender 2016"                                                                                                                                                                                                                                                                                                       Daniel HERRERA­­­­­­­1
 El Ministerio de Educación de la Nación impulsa para el 18 y 19 de octubre un dispositivo de evaluación para los estudiantes de tercer grado de primaria y segundo año de secundaria de tipo “muestral” (sólo algunos cursos por escuela), y para los estudiantes de sexto grado de primaria y quinto o sexto año de secundaria de tipo “censal”, todos los y las estudiantes serán examinados. Este dispositivo se realizará con el apoyo de los Ministerios provinciales, se describe hasta en videos institucionales (CPE Neuquén) y plantea como objetivo el “saber dónde estamos”. Se  intentan establecer nuevas categorías y funciones para docentes y directivos, a quienes se les asignan roles de “aplicadores y veedores” respectivamente, es muy llamativa la descripción del procedimiento evaluativo, cuyas guías tienen tiempos asignados para su resolución, la necesidad de otorgar un “número de identificación” para cada estudiante según listado que “debe adjuntarse” para garantizar “confiabilidad y válidez” al dispositivo y responsabilizando al directivo-veedor de resguardar la confidencialidad de los resultados.
  Las organizaciones de trabajadoras y trabajadores de la educación de todo el país y la CTERA en su último congreso han rechazado este operativo de evaluación, no puede admitirse la violencia simbólica que implica la imposición de significaciones, que intenta legitimar un dispositivo que reconstruye la estructura de relaciones en las escuelas captando representaciones, percepciones y vivencias de los protagonistas de las prácticas educativas a través de pruebas estandarizadas y con cuestionarios cerrados, es decir, estudiantes y educadores de manera descontextualizada no pueden naturalizar una evaluación como actividad tecnológica neutral (Popkewitz), evaluar es una actividad pedagógica con una dimensión política y no puede admitirse que se intenten medir los resultados de aprendizajes para establecer lo que Perrenoud denomina “jerarquía de excelencias”, esto es, escuelas y estudiantes como imagen ideal de una práctica dominada a la perfección, cumplida, auténtica, para generar el ranking de instituciones. Esto implicaría abandonar y desconocer que la enseñanza es una práctica social y que la evaluación es una valoración a partir de la descripción, la comprensión y la explicación de la dinámica interna del enseñar y del aprender, que le posibilita al educador la regulación crítica de la acción pedagógica, es decir, la evaluación es una parte que posibilita re-pensar del proceso de enseñanza – aprendizaje y posibilita superar la visión instrumentalista.
   El gobierno de Cambiemos es fuertemente conservador, en términos políticos, y en el ámbito educativo esta característica es muy clara, los asuntos sociales tienen para ellos una mirada restringida y utilitarista que podemos sintetizar en una visión tecnicista – instrumentalista.
La evaluación en el ámbito de la didáctica
  Abordar los múltiples significados del término “evaluación” exceden los límites de este trabajo, lo interesante para desentrañar el operativo de evaluación “Aprender 2016” es, sin desconocer el reduccionismo que esto implica, situarlo dentro de un modelo socio histórico determinado, una concepción que considera su dimensión política. Podemos plantear las evaluaciones educativas dentro de dos modelos didácticos: el tecnicista y el contextualizado.
   El modelo tecnicista – instrumentalista surge con el desarrollo de las sociedades  industriales de occidente, donde el mejoramiento puede estar guiado por expertos, con base científica y legitimadora de la actuación profesional. Son los expertos los que establecen los instrumentos de evaluación, los exámenes formales, los test que caracterizan las uniformidades estandarizadas, aquí no se consideran la complejidad de los fenómenos sociales ni las sobredeterminaciones, se establece un “referente construido de manera ideal” sobre el que se cuantifican los resultados para poner en marcha los mecanismos de selección y fabricar las “jerarquías de excelencia”. Los expertos, son los especialistas de currículo que garantizan la objetividad y el rigor científico, luego difundirán los resultados y reformaran las desviaciones.
   El modelo contextualizado considera que la práctica educativa se desarrolla en un proceso de construcción de conocimiento en un contexto determinado, aquí la evaluación proporciona información que permite desplegar diferentes estrategias de enseñanza a partir de comprender y explicar el proceso de aprendizaje, implica una apertura conceptual de enfoques metodológicos, éticos y políticos, recuperando el papel del docente que resignifica las estrategias y la direccionalidad de la enseñanza en la totalidad del proceso formativo.
  El operativo de evaluación “Aprender 2016” del gobierno de Cambiemos, es claramente conservador y asienta sus bases en el modelo “tecnicista”. Al analizar este modelo y su implicancia en el sector educativo de los Estados Unidos, Thomas Popkewitz plantea; la evaluación está ligada a la visión particular de racionalidad y eficiencia inspirada en el positivismo lógico. Esta concepción de evaluación se instaló con una doble finalidad: por un lado, dar fe de la necesidad de ayuda federal, y por otro, compromiso de autorenovación del gobierno y de los profesionales de las escuelas.
   Los datos estadísticos recogidos en el marco del Proyecto de Evaluación Nacional, sobre logros y carencias educativas, facilitarían asignaciones presupuestarias. La evaluación se instaló como medio de control y legitimación, con base científica racional y neutral de las condiciones sociales, convirtiéndose en algo profético y dogmático, dejando de ser las prácticas institucionales existentes problemáticas. Con esta concepción de evaluación se crean términos para la clasificación del mérito, la competencia, la patología o la autoridad de grupos e individuos, definiendo implícitamente los intereses que han de favorecerse y los que deben obstaculizarse. Todo este berenjenal genera implicancias políticas muy fuertes, pues su objeto básico es determinar la responsabilidad comportamental, de eficiencia y control en la organización de las escuelas.
   Muchas Organizaciones, Educadores y Estudiantes resistirán la aplicación del dispositivo nacional de evaluación, no hay conocimiento sobre el contenido de las guías de examen, sólo la certeza de una práctica descontextualizada y que responde al modelo tecnicista instrumentalista. Sostenemos la necesidad de reconocer el valor de la evaluación que centra la mirada en la comprensión de los procesos de aprendizaje articulando desde allí su propuesta de enseñanza, para que se garantice el derecho a aprender o, dicho en términos más habituales, el derecho a la educación.

Neuquén, 12 de octubre de 2016.
                                                                                Prof. Daniel HERRERA









1.     Profesor y Licenciado en Ciencias de la Educación – FACE – Universidad Nacional de Comahue. – Director del Centro Provincial de Enseñanza Media N° 12 – Neuquén Capital.-

III Encuentro hacia una Pedagogía Emancipatoria en Nuestra AméricaEducación, construcción, disputa y contradicción.Eje Temático: Políticas Educativas.


“La política pedagógica sindical de Aten  y la construcción de un Diseño curricular para el nivel secundario en la Provincia del Neuquén”

Este Trabajo fue presentado el viernes 30 de septiembre de 2016 en el Centro Cultural de la Cooperación

Daniel HERRERA – Secretario de Nivel Medio, Técnico y Superior de aten Provincial. José GIRINI – Marcelo LAFON – Representantes de aten en la Mesa Curricular Provincial. Cecilia GONZALEZ- Asesora Técnica en Vocalía Gremial electa por los Docentes en el CPE. Pablo MEULI – Representante Institucional CPEM N° 53 – Distrito VIII – Neuquén.
Asociación de Trabajadores de la Educación de Neuquén (aten) – CTERA – CTA.
                                                                                         Neuquén, 12 de agosto de 2016


Neuquén, como provincia, se constituye en el año 1957. En las elecciones democráticas de 1963 hace su aparición el partido provincial MPN (Movimiento Popular Neuquino) que gana la gobernación y, de manera ininterrumpida, hasta la actualidad, administra los destinos provinciales con miembros de la familia Sapag y otros del mismo partido.
            En la construcción de una identidad provincial consolidan y difunden los símbolos de la provincia mezclándolos con los del partido, dando forma a un Estado/partido que maneja el aparato estatal en beneficio de una dirigencia política y empresaria en desmedro de los sectores populares.
            En el campo educativo, el partido gobernante sólo tuvo iniciativa de generar una política con el Plan Educativo Provincial en la década del ´80, forjando un proceso de descentralización que fortaleció los distritos educativos en la planificación y desarrollo de iniciativas colectivas que se plasmaron en la creación de un importante número de instituciones escolares.
            El MPN se caracterizó en su historia por adoptar, de manera sistemática y sin mayores cuestionamientos, las políticas educativas que se impulsaron desde el poder central a nivel nacional, resignando toda posibilidad de participación de los actores de nuestro territorio. Silvia Barco sostiene que “el análisis de la normativa indica que las medidas tomadas en el período 1993-2007 para incorporar y mantener a los alumnos en las escuelas estatales de nivel medio se corresponden con el modelo de focalización en materia de políticas sociales. La pobreza, en la provincia petrolera, se instala con dureza en la década del ´90, tras las privatizaciones y se atienden en las escuelas ´compensando y adecuando´”[1].
Las distintas gestiones del gobierno provincial en el campo de la educación pública entienden “a la política como acción remedial del Estado frente al conflicto[2]. En este marco, debemos hacer una especial mención a la lamentable historia que nos atraviesa como sindicato y como sociedad. Es Neuquén el lugar en el que el poder político a cargo de Jorge Sobisch, tomó la decisión de fusilar al compañero Carlos Fuentealba, como aleccionador para quienes se atrevan a pelear por mejores condiciones de trabajo, por salario y por la educación pública. La lucha por Justicia Completa es uno de los pilares de ATEN. El ex gobernador Sobisch es tan responsable como el Cabo Darío Poblete, condenado por ser quien jaló el gatillo.
            Ese mismo Estado/partido, que se encargó de encubrir a Sobisch con una justicia subordinada, es el mismo que a lo largo de los últimos años, particularmente desde el 2010 al 2014, ha venido llevando adelante espurios e inconsultos intentos de introducir “cambios” o “transformaciones” curriculares en el nivel secundario de las escuelas medias y técnicas, al amparo de las resoluciones del Consejo Federal de Educación, sin tener claro o, peor aún, sin reconocer, los abundantes diagnósticos que existen sobre el sistema educativo, en diversos ámbitos como el académico, el sindical, el proveniente cada una de las instituciones escolares, e incluso del gubernamental.
La fragmentación que sufre el sistema se ha visto agudizada en estos últimos años por las demandas provenientes de distintos sectores de las comunidades educativas, con la heterogeneidad que nos caracteriza como región. En ese contexto, es una tarea compleja la de plantear que se revisen y construyan políticas de Estado que garanticen la Educación como un Derecho Social. .
En un contexto de alta conflictividad por la falta de lineamientos político – pedagógicos (entre otras tantas demandas), con ausencia “real” del Estado en lo que refiere a políticas públicas en el ámbito educativo, con absoluta omisión de las capacidades, experiencias y trayectorias instaladas en el seno de las escuelas, a fines del año 2014 y comienzos del año 2015 se sancionan las Resoluciones 1368/14, 097/15 y 854/15. Las mismas proporcionaban el marco normativo para la intención solapada del Gobierno Provincial de llevar adelante el diseño de un Currículum para el Nivel Medio, con funcionarios del mismo partido y  docentes elegidos discrecionalmente, “a dedo”, que conformaron una comisión para realizar esta tarea desde una mirada de experticia y funcional a sus intereses (tecnocracia del gobierno). Esta metodología adoptada no contemplaba una construcción horizontal, participativa y democrática a partir de las propias instituciones educativas y de experiencias previas que habían tenido lugar en la provincia, como fueron la construcción curricular del Nivel Inicial y la del Nivel Terciario de los IFD, ambas experiencias impulsadas y sostenidas desde la organización sindical.
En un marco de improvisación y “urgencias”, para seguir incorporando a la provincia dentro de los beneficios que otorgaba la alineación directa, y por qué no sumisión, a la política nacional y los acuerdos firmados en el Consejo Federal de Educación, nuestro sindicato ATEN y su actual conducción (Trabajadores por una Educación Popular -TEP) resistió esta metodología mediante sus representantes en del Cuerpo Colegiado del Consejo Provincial de Educación, y se rechazaron las Resoluciones aludidas, logrando así la derogación de las mismas. También, entendiendo que el rechazo en sí mismo no resolvía cuestiones de fondo, se adoptó una mirada propositiva que dio como resultado  la Resolución N° 1697, de septiembre del 2015, a partir de la cual se conforma una Mesa para la Discusión Curricular (MC) del Nivel Secundario, que garantiza la representación de todos los actores del Sistema Educativo.
A partir de la necesidad de aplicar este marco normativo, es en el que se desarrolla la experiencia a narrar de la construcción democrática del Diseño Curricular, como un proceso colectivo, horizontal, bajo la coordinación de un equipo docente de la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad Nacional del Comahue, encabezado por la Dra. Silvia Barco (de reconocida trayectoria académica). A partir del funcionamiento de este mecanismo, se espera que estén reflejadas todas las realidades que atraviesan a las escuelas secundarias; a sus estudiantes; a la labor docente y las condiciones de trabajo; a los formatos escolares y las estrategias de enseñanza y aprendizaje; a los contenidos disciplinares, entre otras dimensiones. Uno de los aspectos que señalamos como fundamental desde la organización sindical es el compromiso de garantizar (explícitamente enunciado en la Resolución referida) la estabilidad docente para titulares e interinos, así como también la participación democrática de todos los actores involucrados, la inclusión de todas las voces que hagan más rico el proceso, teniendo como centro de la tarea a las y los adolescentes, jóvenes y adultos que transitan el nivel secundario en sus distintas modalidades.
Esta “participación democrática” se visualiza en la composición de la Mesa Curricular, que se conforma con 4 representantes del Consejo Provincial de Educación, 3 del sindicato ATEN (con dos votos), 3 supervisores y 22 representantes de los trabajadores de las 143 escuelas media. Ellos son los genuinos portadores de las diversidades culturales, geográficas y de modalidades que encierra nuestra provincia estando presentes en la Mesa Curricular. De ese modo, desde ATEN se pretende potenciar y orientar las discusiones que garanticen que escuelas medias y técnicas, escuelas período septiembre/mayo y febrero/diciembre, de centros rurales y urbanos puedan hacer que sus voces sean tenidas en cuenta.
Por lo expuesto hasta aquí, este proceso de discusión democrática sostiene la necesidad de una reflexión sobre la política educativa desde una perspectiva crítica, dialéctica y emancipatoria, para poner en tensión las demandas y necesidades que deben sostenerse en la construcción de un Diseño Curricular como Proyecto Político Pedagógico gestor de una  Pedagogía Emancipatoria, “entendida como múltiples pedagogías, reflexiones y prácticas que se realizan de manera pertinente y situada en sus contextos, que permiten el reconocimiento de lo propio, de lo particular de las organizaciones, de los sujetos que participan en ellas y que las convierten en un lugar de sentido y acción para grandes transformaciones que se requieren en el continente”[3].
Esta es una tarea de gran envergadura y requiere de un compromiso y trabajo colectivo que incluya a todos los actores educativos y sociales posibles; que involucre progresivamente a quienes hasta hoy hemos sido excluidos de la discusión desde los espacios de poder concentrado (políticos, académicos y editorialistas)para resignarnos  al papel de meros ejecutores y repetidores de prácticas e ideas pedagógicas, llevándonos a una constante resistencia en lucha para ocupar el lugar que nos compete como trabajadores de la educación.
También nos parece fundamental expresar que pensar una educación liberadora, emancipatoria exige recuperarnos del epistemicidio sufrido en manos del capitalismo salvaje que asola nuestro continente desde el siglo XV; demanda “construir una epistemología para este proyecto pedagógico que supone una perspectiva endógena que recupera la valoración de lo propio y los conocimientos producidos, distribuidos y apropiados deben superar la fragmentación disciplinar, la escisión entre teoría y práctica, así como contribuir a superar la división social del trabajo entre lo manual y lo intelectual”.[4]
Sostener estos supuestos implica definir, en cierta manera, qué entendemos por “epistemología emancipatoria”. Esta definición puede resumirse recurriendo a los postulados de Boaventura de Sousa Santos cuando se refiere a una epistemología denunciante del ya mencionado epistemicidio; una epistemología que recupere los conocimientos oprimidos y marginados por el dogma cientificista y los poderes hegemónicos del conocimiento colonialista; y una epistemología que construya nuevos conocimientos de resistencia, alternativos al capitalismo y al colonialismo globales intensificando la voluntad de transformación social.[5]
Desde nuestra organización sindical impulsamos este necesario debate en este momento histórico. ATEN tiene la fuerza para organizar un movimiento social que genere y sostenga la necesidad de los sectores populares, para promover la construcción democrática y participativa, para dar forma a un modelo de trabajo docente, corresponsable y protagonista de una educación liberadora.
Al momento de dar inicio formal a la Mesa Curricular Provincial para el nivel secundario en el mes de mayo del año en curso, desde nuestro sindicato ya se habían elaborado y difundido documentos con la intención de generar los debates con los compañeros y compañeras trabajadores de la educación sobre la importancia de la participación y compromiso en esta tarea, y la necesidad de que todas las escuelas medias y técnicas eligieran a sus representantes para la conformación del espacio de trabajo. Dichos documentos dan cuenta de la postura ideológica, de las acciones que se impulsan desde la organización, como así también de las demandas que subyacen a lo largo y a lo ancho de las escuelas secundarias.
Queremos destacar que nos encontramos a la fecha en pleno proceso de trabajo, habiéndose concretado ya cuatro reuniones de la MC en los meses de Mayo, Junio y Agosto, dos Jornadas Institucionales pautadas con actividades propuestas por esta Mesa de manera colectiva y democrática,
Desde ATEN  este trabajo supone avanzar en la democratización de la distribución social del conocimiento, generar políticas educativas que articuladas con políticas económicas y sociales concurrentes, intenten superar el conflicto histórico entre desigualdad social y desigualdad educativa. Para lograr esto, resulta necesario transformar concepciones, formatos escolares y regulaciones administrativas. Necesitamos discutir la complejidad de las mejoras que nos proponemos alcanzar recuperando las “buenas prácticas” y la mirada sobre la totalidad del trayecto formativo que se ofrece a los estudiantes, superando la mirada centrada en la signatura, redimensionando el trabajo transdisciplinario y colectivo.   
BIBLIOGRAFÍA
BARCO, Silvia y otros (2013) “Políticas educativas y nivel medio de educación en la provincia de Neuquén. El problema de la desigualdad educativa y la obligación legal de la universalización”, FCE Unco
BRITO, Gisela y otros (2015), “Construir Caminando. Reflexiones y aprendizajes acerca de las expediciones pedagógicas. Venezuela – Argentina (2013-2014)”Buenos Aires, Argentina. Indelcoop – CTERA.
DE SOUSA SANTOS, Boaventura, (2009) “Una Epistemología del Sur”, México. Siglo XXI CLACSO coediciones.
DOCUMENTOS PARA EL DEBATE – aten – 2015/2016 – www.atenprovincial.com.ar

Daniel HERRERA – Secretario de Nivel Medio, Técnico y Superior de aten Provincial.                 José GIRINI – Marcelo LAFON – Representantes de aten en la Mesa Curricular Provincial. Cecilia GONZALEZ- Asesora Técnica en Vocalía Gremial electa por los Docentes en el CPE. Pablo MEULI – Representante Institucional CPEM N° 53 – Distrito VIII – Neuquén.
Asociación de Trabajadores de la Educación de Neuquén (aten) – CTERA – CTA.
                                                                                            Neuquén, 12 de agosto de 2016




[1] Silvia Barco y otros “Políticas educativas y nivel medio de educación en la provincia de Neuquén. El problema de la desigualdad educativa y la obligación legal de la universalización”, FCE Unco, 2013
[2]Opcit, página 4.
[3] Brito, Gisela y otros (2015), “Construir Caminando. Reflexiones y aprendizajes acerca de las expediciones pedagógicas. Venezuela – Argentina (2013-2014)”Buenos Aires, Argentina. Indelcoop – CTERA. cit.pag. 12
[4]Idem anterior, p. 29                                                            
[5]De Sousa Santos, Boaventura, (2009) “Una Epistemología del Sur”, México. Siglo XXI CLACSO coediciones. P. 12-13

lunes, 30 de mayo de 2016

SINCERAMIENTO PEDAGÓGICO

Sinceramiento Pedagógico.                                       Prof. Daniel HERRERA

     Cuando uno escucha planteamientos sobre la educación, los docentes y las prácticas escolares, siempre intenta contextualizar esos posicionamientos y comprenderlos como productos de una política de significación. Entonces, no es casual que desde algún Ministerio o algún funcionario se intente establecer, según Casullo una “discursividad legitimadora” que ponga en crisis los relatos de los últimos años. Para muchos de nosotros y nosotras es la restauración de la crisis de la razón, una verdadera bofetada al impulso emancipatorio, al proceso social e histórico que aceptaba las diferencias, que promovía la inclusión y la universalización de la escolaridad, que plantea a la educación como un derecho social y al sujeto pedagógico como generador de significados que construye y se transforma en la producción social del conocimiento.
   ¿Qué nos pasa por nuestro sistema de ideas cuando se instala el consumismo, el individualismo y la inmediatez por sobre el “buen vivir colectivo”?. Las políticas económicas de austeridad, ajustes estructurales, privatizaciones y recortes de derechos, vienen acompañadas de un conjunto de conceptos y políticas educativas que intentan la deslegitimación no sólo lingüística, sino de las acciones y alcances pedagógicos de los últimos años. Así, nos hablan de la finalización de la “pedagogía de la compasión”, de la necesidad de instaurar una “pedagogía meritocrática” donde se pierde de vista, como sostiene Adriana Puiggrós, que… “el que gana la carrera es sólo uno”  donde “la evaluación sustituye a la enseñanza (…) lo que vale es medir bien, no saber”.  Desde la provincia de Mendoza, nos anuncian un sistema de tutorías para que los y las estudiantes con dificultades de integración se queden en sus casas y asistan con sus tareas una o dos veces por semana a la institución escolar para el seguimiento y orientación con sus docentes tutores.
¿Qué nos pasa ante semejantes afirmaciones?... Al compartir por Facebook u otras redes informáticas artículos con estas declaraciones de principios, nos conmueve nuestra subjetividad, y lo primero que surge es el insulto y la bronca. Pero luego, nos vemos obligados a reflexionar sobre la profundidad de las concepciones, de sus portadores y de la aceptación de parte de la sociedad. Lo primero que se me ocurre es plantear la “pedagogía de la derecha”, pero no, creo que es más profundo, son concepciones que comparten algunos docentes y parte de las comunidades educativas, que aunque se consideran “progresistas” son profundamente conservadores y autoritarios en sus prácticas y no aceptan la enseñanza democrática, plantean críticas elementales y destrozan toda ilusión de continuidad de experiencias y perspectivas de una sociedad cada vez más justa y más igualitaria, que genere posibilidades y oportunidades educativas. Así, nos encontramos con un sinceramiento pedagógico para los que sostienen que el relato y las prácticas democráticas sólo tienen alcances populistas y demagógicos. Vivimos momentos del resurgimiento de un discurso autoritario y meritocrático, para algunos, como sostiene Follari… “el Estado de Bienestar ha desaparecido como posibilidad, dando lugar a una jungla individualista, y existe el peligro constante de una tecnocratización de lo político que convierta  a su ámbito en una maquinaria anónima y sin capacidad alguna de reconocimiento de lo axiológico”. Para muchos otros y otras, no es factible imaginar una práctica educativa que no se sostenga en una comunidad concreta, donde se miden las consecuencias de una acción sostenida en una racionalidad sustantiva con exigencias éticas, políticas e igualitarias.  
    ¿Pero de donde provienen esas concepciones del sentido práctico?¿Por qué promover la eficacia en educación?
  En “La condición posmoderna” Jean Francois Lyotard plantea los principios y lineamientos que se oponen al “humanismo emancipatorio”. Recordamos sólo algunas de sus prescripciones, para hacer conscientes algunas ideas que muchos sostienen de manera irreflexiva, y que intentan potenciar como una crisis de legitimidad de un Estado presente y de una práctica pedagógica democrática.
   Para Lyotard “el Estado empezará a aparecer como un factor de opacidad y de ruido para una ideología de la transparencia comunicacional, la cual va a la par con la comercialización de los saberes (…) el saber es y será producido para ser vendido, y es y será consumido para ser valorado en una nueva producción: en los dos casos, para ser cambiado. Deja de ser en sí mismo su propio fin, pierde su valor de uso (…) la deslegitimación y el dominio de la performatividad son el toque de agonía de la era del Profesor: éste no es más competente que las redes de memorias para transmitir el saber establecido”. El significado de performatividad es similar al de “eficacia”, e indicador cuantitativo de productividad más actividad, “performance” (Filosofía de la Educación – FCE – UNCo).
   Queda claro que para algunos el conocimiento y “el saber” son mercancías que se pueden adquirir en el “mercado”, las oportunidades educativas serán de aquellos que tengan los méritos y los logros individuales según exámenes estandarizados. Así, la pedagogía se convierte en un recetario tecnocrático de aplicación universal y homogénea.  Para muchos otros y otras, como sostiene Pablo Imen, se trata de valorar y recrear la “Pedagogía(s) Emancipadora(s)”, imbricar el rescate histórico, la sistematización del presente, la conceptualización de las prácticas (pasadas y actuales) con un debate y una acción orientada al futuro, que no está escrito y que será el resultado de una construcción histórica y social colectiva.
   El sinceramiento pedagógico es un proceso complejo y profundo de nuestra subjetividad, promueve preguntas, observaciones y negaciones en realidades sociales determinadas…  las preguntas necesarias y contextualizadas… ¿Para qué, por qué y para quienes educamos?... En todo este berenjenal las respuestas no pueden ser desde una visión artificial o momentánea, las respuestas tienen que ser desde lo profundo de nuestras convicciones sostenidas por verdaderas acciones éticas puestas de manifiesto en cada acto pedagógico, dada su dimensión social y cultural.